sábado, 12 de mayo de 2007

Una pareja hace que un cerrajero le abra la puerta para entrar a robar en una vivienda de Castelló

Un hombre y una mujer que rían entrar en una casa y, como no eran los propietarios ni tenían llave, decidieron llamar a un cerrajero para que les abriera la puerta. Una vez en el interior, solicitaron la apertura de una caja de caudales de la que, al parecer, sustrajeron un reloj de mujer.


En cambio, cuando el cerrajero les pidió que abonaron el servicio, se negaron a ello manifestando que no era su casa, por lo que aquél requirió la presencia de la policía local de Castelló que descubrió que esta rocambolesca historia era, en realidad, un robo con fuerza en las cosas por lo que detuvo a los presuntos autores, que resultó ser una pareja rumana sin domicilio conocido.
Según informaron fuentes policiales, sobre las 8.30 horas de ayer, en la sala del 092 se recibió una llamada de un cerrajero que indicaba que había abierto una puerta en una vivienda unifamiliar del camino viejo de l'Alcora, en Castelló, dado que así se lo había requerido una pareja.
Una patrulla se dirigió al lugar indicado y, al llegar, observó que la puerta estaba abierta. En el comedor había una mujer, tumbada en el sofá, medio desnuda, según detallaron las citadas fuentes, y el hombre, junto a ella, vistiéndose.
Al pedirles la documentación y preguntarles por la propiedad de la casa, la pareja, según las mencionadas fuentes, indicó que no llevaba nada que les identificara mientras que manifestaron que la vivienda era de una amiga suya y, como no tenían llaves, habían llamado a un chico -el cerrajero-, para que les abriera la puerta.

Deshabitada

La patrulla se puso en contacto con la propietaria de la vivienda, quien negó la versión de la pareja. La dueña indicó que la casa es de su hija pero que ésta se encuentra en prisión actualmente, por lo que la vivienda está deshabitada. La mujer manifestó a la policía que no quería presentar ninguna denuncia contra los detenidos.
Los protagonistas de esta historia fueron identificados por los agentes actuantes como S. R. T., un hombre de de 26 años, y S. P. R., una mujer de 38 años, ambos nacidos en Rumanía.

Fuente: Levante.

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