Un comerciante recibió un artefacto explosivo en su local. El paquete viajó desde Buenos Aires hasta General Pico sin ser detectado. Al ver su contenido, Alejandro Base dio aviso a la Policía, que lo hizo detonar sin generar víctimas.
Un comerciante de la ciudad pampeana de General Pico recibió por encomienda en su local una bomba de alto poder explosivo que no alcanzó a activarse y que finalmente fue detonada por la Policía, en un polígono de tiro.
El artefacto explosivo, que contenía balas calibres 9 y 22 milímetros, tornillos, clavos y otras municiones, fue despachado desde Buenos Aires, en una caja de 15 por 15 por 30 centímetros, según dijeron fuentes policiales.
El artefacto pudo haber arrojado consecuencias fatales para su destinatario y haber destruido el edificio donde fue recibido, en la calle 19 entre 30 y 32 de General Pico, según aseguraron los investigadores del caso.
El comerciante fue identificado como Alejandro Base, un distribuidor de productos de panadería que sospecha de un ex empleado que le había iniciado una demanda tiempo atrás, según se indicó.
Base comenzó a abrir el paquete en la noche del lunes pasado, poco después de haberlo recibido, pero al observar que contenía cables, dos pilas y un broche metálico haciendo masa, dio aviso a la Policía.
El jefe de la Policía de La Pampa, Ricardo Baudaux, concurrió a General Pico junto a un especialista en explosivos, que aconsejó que se detonara el contenido de la caja.
El paquete fue trasladado hasta el polígono de tiro del Regimiento 13 y, allí, un francotirador del Grupo Especial de Operaciones le efectuó seis disparos de fusil al paquete, hasta que se originó una explosión que tuvo un alcance de 30 metros a la redonda, de acuerdo con lo indicado.
"La bomba estaba armada con balas calibres 9 y 22 milímetros, tornillos, clavos y otras municiones. Tenía dos detonadores y el primero, al estilo “cazabobos”, estaba preparado para que se pensara en una broma. Al seguir desarmando la encomienda, se acciona el segundo detonador y la bomba estalla", dijo el comisario Roberto Ayala, jefe de la Unidad Regional II de la Policía local.
Fuente: 26noticias.com.ar.
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